República Democrática del Congo

NPCYP

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La NPCYP es una red de organizaciones juveniles que trabajan en la consolidación de la paz en la RDC desde 2015. Actualmente cuenta con 81 organizaciones juveniles miembros formales e informales en las provincias de Kivu del Norte, Kivu del Sur e Ituri.
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Desde 2020, NPCYP ha mantenido una asociación estratégica con Peace Direct como parte del desarrollo y la implementación de sus objetivos programáticos. Algunos de nuestros trabajos conjuntos incluyen el proyecto YAP (Acción Juvenil por la Paz), siete proyectos de emergencia financiados por LAF, un proyecto de acción rápida juvenil para la prevención de conflictos violentos en Kivu del Norte financiado por PPL y un proyecto de emergencia para hogares afectados por inundaciones y deslizamientos de tierra en el territorio de Kalehe financiado por la Fundación Bosch.

Responder a las inundaciones mortales

Además de los problemas de seguridad a los que se enfrentan las zonas rurales de la provincia de Kivu del Sur, en 2023 cayeron fuertes lluvias en las aldeas agrícolas de BUSGUSHU y NYAMUKUBI, ubicadas bajo las colinas del territorio de Kalehe. A lo largo de la carretera que une Kivu del Sur con Kivu del Norte, se encontraron plantaciones de banano, mandioca y café envueltas en lodo. Y en varios lugares, las aguas, aún visibles en la aldea, se han llevado los cultivos y el ganado. Según informes y análisis de la sociedad civil, más de 700 casas, una escuela y una iglesia fueron destruidas, con la pérdida de la vida de más de 75 personas, algunas de las cuales desaparecieron sin dejar rastro. Este desastre sumió a la población local en un estado de grave vulnerabilidad. El 4 de mayo, una fuerte tormenta en el territorio de Kalehe causó aún más enormes daños a vidas humanas, bienes y posesiones, lo que acentuó la vulnerabilidad de la situación humanitaria.

NPCYP inició un proyecto de emergencia para brindar asistencia y apoyo a las víctimas de las inundaciones para ayudarlas a recuperarse de las consecuencias del desastre natural, reconstruir sus vidas y prepararse para el futuro, asegurándose de que estén mejor preparadas y sean más resistentes a los desafíos que puedan enfrentar.

El NPCYP trabajó con 100 de las víctimas más vulnerables, incluidas 54 mujeres y 46 hombres de diferentes pueblos y campos de desplazados. Todos recibieron formación en educación financiera para fortalecer su capacidad de aprovechar las oportunidades económicas dentro de la comunidad para una rápida recuperación económica y evitar la dependencia de los programas de ayuda internacional. Al final de la capacitación, cada persona eligió la actividad que quería emprender para empoderarse, como abrir una pequeña tienda, hacer trabajos de costura, pescar y más. Cada participante recibió 100 dólares en forma de crédito, además de suministros físicos para financiar sus actividades, lo que reforzó su capacidad financiera.

Nepa KAROLI fue una de las receptoras de fondos de inversión. Nos dijo: «Recibir esta subvención fue un punto de inflexión en mi vida. Gracias a ella, pude iniciar mi propia pequeña empresa. Va mucho más allá del dinero: es una oportunidad para recuperar el control de mi vida y ayudar a reconstruir mi comunidad».

Las consecuencias del desastre de mayo de 2023 en el territorio de Kalehe también fueron psicológicas. Perder posesiones materiales, pero sobre todo perder a un ser querido, puede resultar extremadamente desestabilizador. Por ello, 20 personas también recibieron formación sobre la curación de traumas a nivel comunitario, para poder apoyar la recuperación mental de su comunidad. Impartieron cuatro sesiones de sanación para los participantes del proyecto:

  1. Crear conciencia sobre las lesiones internas sufridas por los beneficiarios como resultado de las pérdidas causadas por los desastres;
  1. El duelo como experiencia global y el afrontamiento de los sentimientos de pérdida;
  1. Reconciliarse con uno mismo y con el entorno;
  1. Establecer un proyecto de vida para reconstruir la esperanza.

Clovis MURHULA, un participante del proyecto que participó en la capacitación sobre la facilitación de sesiones de curación de traumas en la comunidad, comparte su experiencia después de completar la capacitación: «Las sesiones me dieron una nueva perspectiva de la vida. Me ayudaron a sobrellevar el dolor y a reconstruir mi vida. Ahora me siento preparada para empezar algo nuevo, para reconstruir mi vida».

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